Diseño y decoración para un Centro de Refugiados de Madrid

Porque los proyectos solidarios y el buen diseño no tienen por qué estar reñidos. Y prueba de ello son las nuevas aulas de biblioteca y de juegos para refugiados del Centro de Refugiados de Getafe.

Fue hace un año cuando me llamaron desde CEAR, la Comisión Española de Ayuda al Refugiado, para proponerme la decoración varias salas para niños en uno de los Centros de Refugiados que tienen en la Comunidad de Madrid.

Ya me conocían por haber colaborado con ellos en el primer evento En tu Piel Refugiado, y de ahí que supieran que era arquitecto y que estaba muy orientada a reformas y proyectos de locales para niños. Así que inmediatamente dije que si, que de manera altruista me comprometía a ayudarles en todo lo que estuviera en mi mano.

Como en cualquier otro proyecto, lo primero que hice fue investigar y preguntar acerca de la Comisión, y por eso abrasé a preguntas a Vero y a Marta (mis interlocutoras en todos estos meses), sobre cómo funcionaba la ONG, los centros, cómo trabajan con los refugiados, de cómo llegan allí o de las dificultades y trabas burocráticas que tienen que pasar hasta ser aceptados como “refugiados”. Algo mucho más complicado de lo que pueda parecer a primera vista, todo sea dicho.

Y después me hablaron del presupuesto del que disponían, una cantidad que había sido conseguida gracias a los voluntarios de la Fundación Telefónica, dentro de su iniciativa “Reto Solidario. Comparte su viaje, y que no superaba los 4.000 euros.

Esta cantidad iba a ser destinada íntegramente para el equipamiento de la ludoteca infantil y de ambas bibliotecas (la de adultos y la de niños), y además los voluntarios iban a colaborar con su propio tiempo en el montaje del mobiliario para estos nuevos espacios, a los que yo tenía que buscar el lado bonito.

Mi propio reto personal fue convertir unos espacios vacíos y fríos de un gran edificio en unas salas acogedoras que invitaran al disfrute de las familias que lo han perdido todo y que buscan un nuevo hogar. Y eso no era fácil con un presupuesto limitado, si no querías recurrir a lo de siempre.

Así que para las bibliotecas combiné algunos muebles poco conocidos de IKEA, como las estanterías o la mesa de reuniones, con unas sillas de oficina de diseño de colores, cuyo resultado final es una sala fresca y alegre que invita a la lectura.

Y en el caso de la sala de juegos diseñé dos espacios: una para relax o para bebés con una alfombra muy alegre y mullida y unos pufs a juego; y otra zona con una cocinita, un carrito con libros y unos bancos cajoneras para guardar todos los juguetes de los más mayores.

Al final ambas salas iban decoradas en las paredes con vinilos de My Vinilo que nosotros mismos pegamos, y que daban el toque final a los distintos espacios.

El resultado son unos espacios alegres y acogedores que esperamos sirvan de REFUGIO REAL a las familias que allí se alojen. Y todo combinando piezas de mobiliario diferentes y de diseño con otras económicas y mucho más accesibles.

Un ejemplo más de cómo gracias a la empatía de la gente y el buen hacer de las personas que quieren un mundo más justo se pueden hacer grandes cosas.

Mil gracias a CEAR por proponerme este reto, a BNP PARIBAS por el apoyo para las obras de ampliación del Centro de Getafe y a los voluntarios de la FUNDACIÓN TELEFÓNICA por vuestra aportación económica e incluso personal el ese increíble día de montaje. ¡Mereció la pena el esfuerzo!

Os dejo con el resultado final, con las fotos del día del montaje y con un vídeo realizado por Andrés Vázquez de todo el proceso.

Espero que os guste y que os animéis también vosotros a aportar vuestro granito de arena para conseguir un mundo mejor. 🙂

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1 comentario
  1. Enhorabuena por tu trabajo pues el resultado final es precioso.
    Nosotros también ayudamos a nuestras artesanas a divulgar sus alfombras un poco por todo el mundo. Podéis conocer su trabajo en nuestra página Sukhi.es.

    Un Saludo.

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