Contar con Mónica Diago para la reforma de nuestra casa ha sido una experiencia muy positiva y solo puedo recomendarla. De ella destacaría su enorme profesionalidad a la hora de cumplir en contenidos o plazos y la gran creatividad que ha demostrado para ir adaptando el proyecto inicial a los posibles cambios o imprevistos que siempre surgen en este tipo de obras.
Pero, sobre todo, para mí su ayuda ha sido clave por el gran gusto estético que tiene para convertir cada plano en un hogar cálido y práctico: sabe reconciliar cada ambiente con el gusto del cliente. En mi caso le ha dado muchas vueltas a los planos hasta lograr encajar su estilo tan personal, que yo definiría como nórdico con materiales naturales y un toque sofisticado, con las necesidades de mi familia numerosa: mantener espacios abiertos y comunicados pero que puedan convertirse en habitaciones más independientes cuando tengamos visita, plantear una cocina protagonista con varios espacios de trabajo, conservar una sala de juegos donde los adultos también podamos compartir ratos de lectura… ¡y sin perder espacio de almacenaje con propuestas imaginativas por toda la casa! Tener a Mónica ha sido como contar con un ejército de hadas creativas con ideas y respuestas para cada centímetro cuadrado.